La CEO de Alicante Urbana, María José Rocamora, publica en su página personal de LinkedIn el artículo La evolución del IPC y la invasión de Ucrania generan el encarecimiento de los precios y posibles retrasos en las entregas por la falta de materiales, en el que analiza el impacto del conflicto ucraniano sobre el sector de la construcción.
En su artículo, la CEO señala que “el proceso de profesionalización y modernización” que ha vivido el sector ha permitido una remontada de los efectos de la pandemia, logrando que “[el sector] supere las 46.000 viviendas vendidas en la provincia de Alicante durante 2021 (…), un 21% más que el año anterior”. Sin embargo, esta “intensa labor de las empresas promotoras” se ha visto alterada por “la evolución de la inflación, que genera una subida constante de costes por el impacto de la energía y los combustibles”.
A este respecto, Rocamora hace referencia al análisis realizado por la Asociación de Promotores de la Provincia de Alicante (Provia) sobre esta escalada de precios, alcanzando la conclusión de que esta situación “pone en peligro la viabilidad de los proyectos actuales y frena nuevas iniciativas residenciales”, dejando de iniciarse hasta más de 1.500 viviendas, y provocando así “una pérdida de inversión en la provincia de más de 326 millones de euros”.
Estos son solo algunos de los datos que se destiñen del análisis del sector de la construcción de Provia, que no contemplaba aún la “gran incidencia de la invasión de Ucrania”, un escenario de tal gravedad que ha provocado que “muchas compañías se enfrenten a una situación inusual e insostenible en la que tienen contratos firmados con anterioridad a la escalada de los precios y éstos quedan desfasados con rapidez”.
Así, la principal conclusión que extrae la CEO de Alicante Urbana tras analizar el estado del sector en la actualidad es que “la recuperación de una situación de mayor normalidad dependerá tanto del tiempo que tarde la Administración en tomar medidas para contener los precios y recuperar el suministro de materiales, como de la duración e intensidad del conflicto bélico”. Por último, Rocamora asevera que “solo de esta manera el sector inmobiliario español recobrará su atractivo como destino de residentes e inversiones”.